Siete cosas sobre IKO que seguramente no sabía
¿Se pronuncia “áico” o se pronuncia letra por letra? Esa es una de las preguntas más comunes que le hacen a nuestro equipo de fidelización del cliente. ¿Y qué significa IKO? Sabemos que nuestros miembros ROOFPRO saben todo sobre nuestras tejas, y las adoran, pero… ¿cuánto saben sobre IKO, la empresa? ¡Pongamos sus conocimientos a prueba! Aquí le traemos siete cosas que seguramente no sabía sobre IKO.
1) ¿Se pronuncia áico o I-K-O?
La respuesta corta es: áico. Y aunque sí tiene un significado (el nombre de nuestro fundador, Isidore KOschitzky), no se pronuncia letra por letra. ¡Pero no se preocupen, les vendemos productos hasta a los que lo pronuncien mal!
IKO se fundó en 1951, cuando Isidore y su familia emigraron a Canadá desde Polonia, donde tuvieron que enfrentar el antisemitismo posterior a la Segunda Guerra Mundial. Después de un proyecto compartido llamado Kola Roofing, Sr. Koschitzky se separó de su socio comercial y —dice la historia— juró nunca tener otro socio en su vida más que su esposa, Golda. Cuando comenzó su segundo negocio, se deshizo de la sílaba “la” en “Kola” y agregó su inicial, “I”. Así nació la empresa que lleva su nombre.
2) Nuestra historia comenzó en el oeste de Canadá y se expandió a todo el mundo.
IKO se fundó en 1951 en Calgary, Alberta. Primero fabricábamos papel de construcción y después crecimos y sumamos rollos de recubrimiento de techos a nuestra producción. En el año 1954, fabricamos nuestra primera teja asfáltica, y el resto, como dice la frase, es historia.
IKO prosperó y siguió creciendo, primero se expandió al este de Canadá, con la apertura de una planta de fabricación de tejas en Brampton, Ontario, en 1959. El éxito en Brampton impulsó la expansión al mercado europeo con la construcción de una planta de fabricación de tejas en Ham, Bélgica, en el año 1972. En 1976, se sumó un nuevo establecimiento en Hawkesbury, Ontario.
La primera incursión de IKO en el mercado de Estados Unidos fue en el año 1979, a través de varias adquisiciones, y desde entonces no ha hecho más que expandir su presencia construyendo nuevas plantas en toda Norteamérica. La apertura más reciente fue la planta de Hillsboro, Texas. Y hay dos aperturas programadas para este año en Hagerstown, Maryland y en Brampton, Ontario, en el mismo sitio donde se construyó nuestra segunda planta hace más de 60 años.
IKO implementa un programa de mejora continua en todas sus plantas, que incluye la actualización del equipamiento y la mejora de los sistemas y procesos para maximizar la eficiencia y la productividad, reducir los desecho y potenciar los resultados y la seguridad.
Las fábricas de IKO no funcionan en forma aislada: todas nuestras plantas colaboran entre sí para asegurar que las tecnologías estén alineadas para lograr entregar productos de alta calidad, sin importar dónde se hayan fabricado, consistentemente en todas las plantas e incluso en cada una de nuestras partidas.
3) En 1956, IKO casi desaparece debido a un desafortunado accidente.
A solo cinco años de su fundación, IKO sufrió un revés que muchas otras empresas no hubieran podido superar. Una mañana de domingo del mes de noviembre, un calentador eléctrico en la primera planta instalada por Isidore en Calgary generó un incendio. Cuando llegaron los bomberos, ya no había nada que pudieran hacer. El inventario existente de papel había desaparecido, las tejas se habían fundido y parecían ladrillos, y las vigas estructurales se trenzaron entre sí como su fueran espaguetis. Y lo peor de todo fue que la póliza de seguro de solo cubrió la mitad de los daños. Pero el espíritu empresarial de Isidore no le permitió doblegarse. Y volvió a construir. En seis meses, IKO estaba otra vez en funcionamiento, y solo unos pocos años después logró generar lo suficiente como para expandirse en Brampton, Ontario, donde hoy todavía tenemos una fábrica que brinda servicios al este de Canadá.
4) Seguimos siendo una empresa familiar, administrada en familia.
Como les sucederá a muchos de ustedes, IKO todavía se siente como una pequeña empresa. Nuestro legado, que comenzó como una pequeña empresa de “mamá y papá”, al día de la fecha IKO todavía es administrada por varias generaciones de la familia Koschitzky. Por eso, vivimos guiados por los mismos valores de una empresa pequeña que muchos de ustedes también tienen. Tenemos el humilde deseo de hacer las cosas bien para nuestros clientes y nos sentimos muy orgullosos de verlos triunfar. Nuestros dueños tienen una relación personal con muchos de nuestros clientes y distribuidores, y están involucrados activamente en las operaciones diarias de IKO. Entendemos la importancia de mantener relaciones individuales en el ambiente de los grandes negocios, y respaldamos esas relaciones con productos y servicios que hablan por sí mismos.
5) Nosotros nos encargamos de TODO.
La autonomía de IKO implica que, al poder suministrar la mayoría de nuestros propios materiales, podemos controlar nuestra calidad de una forma que muy pocos competidores podrían igualar.
Contamos con una planta en Clarksville, Tennessee, que produce las hebras de fibra de vidrio que otra planta en Danville, Illinois, utiliza para fabricar revestimientos de fibra de vidrio.
Una planta propiedad de IKO en Barrie, Ontario, extrae e imprime los envoltorios plásticos que protegen nuestras tejas terminadas mientras están en tránsito.
IKO también oxida su propio asfalto; en las plantas IKO almacenamos más de 200,000 toneladas de asfalto fundente.
Además, extraemos y molemos nuestra propia piedra caliza, les damos color a nuestros propios gránulos y hacemos nuestro propio revestimiento posterior en distintas locaciones en toda Norteamérica.
6) Nuestros valores fundamentales nos guían en todo momento.
En IKO, sabemos que nuestra filosofía corporativa, nuestra visión y nuestros valores son universales y son aceptados por todos los miembros de nuestra familia global. Nosotros creemos que:
- Compartir conocimientos nos ayuda a encontrar formas de mejorar nuestros negocios, y todos nos beneficiamos.
- La integridad define cómo hacemos lo que decimos.
- La proyección a largo plazo nos permite darle forma a nuestra toma de decisiones para asegurarnos un futuro brillante.
- El desempeño nos asegura que nunca dejaremos de buscar formas de mejorar.
- La humildad crea relaciones honestas, abiertas y respetuosas.
- La agilidad, combinada con el conocimiento, nos ayuda a ofrecer excelentes soluciones rápidamente.
Estos valores son los principios fundamentales de nuestra compañía, inspirados en la vida y en la forma de pensar de Isidore Koschitzky, y más adelante adoptados tanto por las siguientes generaciones de la familia Koschitzky como por sus empleados. Los hijos de Isidore, Henry y Saul, que todavía hoy forman parte de IKO, describen los valores de la compañía como “esenciales”, “propios” y “prácticos”, y creen que son la única forma de que una empresa crezca, sobreviva y funcione con éxito.
7) IKO en números.
¿Lo sabía? Aquí le damos un vistazo rápido a IKO, en números:
Este año, IKO celebrará su 70avo cumpleaños.
Tenemos más de 4,000 empleados en todo el mundo.
Operamos más de 35 plantas de fabricación en 6 países.
Vendemos nuestros productos a clientes de 94 países en 6 continentes.
Nos asociamos con miembros de ROOFPRO en 2 países y 52 estados/provincias.
¿Quiere saber más sobre los fabricantes de sus tejas preferidas? Puede leer nuestra historia completa y mucho más aquí.